Publicidad
Durante 36 años el Banco de Guatemala y la Superintendencia de Bancos lograron, en algunos casos con las uñas, su independencia y autonomía. Puedo dar fe de esta extraordinaria realidad, pues por algunos años fui miembro de la Junta Monetaria. Fui testigo orgulloso de profesionalismo, honorabilidad y patriotismo del licenciado Ayestas, cuando presentó un informe técnicamente riguroso, que mostraba que el presidente del Banvi, muy allegado a la Democracia Cristiana y a Vinicio, el arquitecto Escobar Donis y dos amigos suyos se habían “peinado” Q12 millones, con los que incluso formaron un banco privado que décadas después quebró. Más tarde,…
Publicidad
Publicidad