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Hace casi dos décadas, los jueves en la página 23 de Prensa Libre: Empresa, Estado y Sociedad, hasta que fui electo diputado al Congreso que, por política del medio (muy comprensible), debí retirarme; y simultáneamente en elPeriódico, los martes durante estos años, excepto los cuatro años que fui Superintendente de Bancos, en que, por iniciativa propia, consideré prudente dejar de escribir. Pero, concluido el mandato, fui invitado para continuar con esta columna y así poder compartirles mi humilde opinión. Escribir en estos espacios no significa remuneración alguna, pero sí representa un privilegio poder compartirles lo que opinamos. Excepto por las…
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