Putin, como Hitler, dijo que no invadiría… pero lo hizo
La historia se repite muchas veces. Lo curioso es que en pleno siglo XXI persistan los aires de imperialismo y poco pueda hacerse a nivel global por impedirlo.
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La historia se repite muchas veces. Lo curioso es que en pleno siglo XXI persistan los aires de imperialismo y poco pueda hacerse a nivel global por impedirlo.
En el lejano año de 1938, el mundo temía ya el crecimiento de la maquinaria militar alemana bajo el mando de Adolf Hitler. Se conocía también su intención de expandirse como un imperio y que deseaba recuperar parte del territorio de Checoslovaquia, pues consideraba a su población de origen alemán. La historia ha colocado al primer ministro británico Arthur Chamberlain como un personaje débil que se dejó engañar por el dictador nazi, quien aseguró que si se le permitía esa recuperación territorial no habría invasiones. Para acordar eso y dejar satisfecho a Hitler, se dio una cumbre con los gobernantes…
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