Ninis y desocupados ociosos
El problema nacional es la desocupación.
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El problema nacional es la desocupación.
Admitir la superpoblación nacional es cosa de sentido común, y si el censo indica que en la ciudad de Guatemala hay menos habitantes en el 2018 que en el 2002, es de asumir algún error, quizá en la medición anterior o en la actual, porque lo que es el incremento de la densidad humana se siente en las calles, en los centros comerciales, en la ausencia de tierra baldía, en el tráfico; lo que no afecta únicamente a la urbe, sino se padece en todos los centros urbanos del país. Basta conducir por Xela, Cobán o Chiquimula para sentir el fenómeno, aunque las cifras frías digan lo que digan. El aumento de la población ha traído consigo un incremento de desocupados, porque encontrar empleo cuesta. Los jóvenes pelean contra cientos por la opción que se abre, pasando muchos a integrar la categoría de quienes ni estudian ni trabajan, o
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