Infancia despojada
El bienestar de toda nación se mide por la plenitud de su niñez y adolescencia.
Publicidad
El bienestar de toda nación se mide por la plenitud de su niñez y adolescencia.
Mientras las potencias globales se disputan el control de los mercados del petróleo, armas, telecomunicaciones, drogas y transgénicos, la niñez sigue siendo despojada de sus elementales derechos humanos. Una niñez presa de la codicia, violencia y deshumanización de los adultos que están dinamitando las esperanzas de un futuro más digno para vivir. Según Unicef, para 2018, más de 125 millones de niños en el mundo –dos terceras partes de los cuales son niñas–, no van a la escuela. De igual manera, más del 80 por ciento de los 45 millones de refugiados y desplazados en el mundo son mujeres, niños y niñas. Y Guatemala, según el informe Las múltiples caras de la exclusión, elaborado por Save The Children, es el país latinoamericano con mayores violaciones a los derechos de los infantes. La exclusión del Estado hacia los niños es colosal: Mortalidad infantil (30 por cada mil), desnutrición crónica (49
Publicidad
Publicidad