CACIF. La hipocresía como método
El secuestro de la democracia.
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El secuestro de la democracia.
Nos hemos acostumbrado en el país, a escuchar de empleados y representantes de una de las élites del sector privado; que ellos propugnan, por libre competencia, igualdad ante la ley, capacidad de pago, certeza jurídica, nadie es superior a la ley. Y una larga lista de principios, que luego sin rubor no practican. Para empezar, aherrojan la economía con prácticas monopólicas, eluden y evaden impuestos, eso a pesar, que por interpósitas personas, han decidido –previamente– cuánto y cómo quieren pagar. Por certeza jurídica entienden solamente sus fundos y no las tierras de pueblos indígenas y campesinos. Deciden qué leyes se aprueban y cuáles no. En fin, un extraño liberalismo, avaro y construido a imagen y semejanza de intereses pecuniarios. El CACIF, un grupo de choque. Tomo la frase del libro de Rachel M. McCleary: Imponiendo la Democracia: Las elites guatemaltecas y el fin del conflicto armado. Artemis Edinter. Se
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