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El escenario político nacional es deprimente en los tres poderes fallidos y corruptos de nuestro Estado, donde la clase política tiene postradas las instituciones con un cáncer terminal. La población está a la expectativa por la inestabilidad y la falta de respuesta a sus demandas, en especial las que le planteó a Jimmy Morales, a quien dio su voto para cumplirlas y respondió con una comedia.
En ese entorno, de entrada doy mi apoyo a Alex Balsells Conde para que presida el actual deslucido Colegio de Abogados. Estoy seguro que con él a la cabeza, podrá jugar el papel digno que le corresponde, de velar por la transparencia. Sus credenciales son impecables y vienen de familia. Me alegra que esté en la contienda, porque es un imperativo participar para sanear la justicia en nuestro país. Toda la Corte de Justicia está cuestionada y se le ha pedido su renuncia en diversos medios para que las Cortes dejen de interferir a favor de los intereses oscuros de la magistrada Stalling. Además, las reformas al sistema de justicia deben contar con magistrados honorables de nuevo cuño, que los hay en el grupo como el que apoya a Balsells Conde. En el plano político es una vergüenza nacional, tanto en el plano interno como internacional, la imagen rota que
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