La resaca
Este escenario NO es una derrota.
Publicidad
Este escenario NO es una derrota.
Después de varios días de euforia, los guatemaltecos de pronto parecemos atacados de resaca, como si luego de tantas semanas de protestas y unas elecciones a ritmo de turbo y #NoTeToca, hubiéramos despertado en un lugar desconocido, acurrucados entre dos extraños: una señora de edad madura y el tipo que vagamente recordamos subido en el escenario haciendo chistes. ¡Horror! Con la bandera todavía amarrada al cuello, nos levantamos de un brinco y nos quitamos las legañas de los ojos, preguntando qué pasó mientras la batucada reventaba el bombo. ¿En serio? ¿Cuál es el estupor? ¿Por qué de pronto nos sentimos abrumados por el baño de realidad, si ya sabíamos de qué iba la cosa hace meses? Las opciones disponibles en las elecciones no eran ni son ideales. Ya lo sabíamos. Las urnas nos entregaron a dos binomios que encabezaban encuestas, los dos con más opciones de ganar. La primera vuelta
Publicidad
Publicidad