Thomas Jefferson (1805), presidente de los EE. UU., afirmó: “Nosotros comenzamos a considerar la idea del golfo como nuestra agua —golfo de Honduras—, esto es esencial para nuestra tranquilidad y comercio… Nuestra fuerza nos permite determinar la ley en nuestro propio hemisferio”. Y luego la idea de control se extendió hacia el territorio latinoamericano, consolidado con el Tratado Interamericano de Defensa Recíproca (TIAR, 1947).  Después que Fidel Castro se declarase simpatizante de la URSS y China, Dwight Eisenhower (1960) ordenó elaborar un plan para retomar el control de la isla mediante una invasión, que iniciaba con el desembarco en bahía de Cochinos o Playa Girón (1961), operación en la que nuestro país desempeñó un rol importante. Como es conocido, el plan fracasó debido a una decisión de última hora del presidente Kennedy.  Un año después la inteligencia norteamericana fue sorprendida con la noticia de que la URSS estaba armando misiles nucleares