Irma De León / DPI 2345018980101

Con sorpresa leí su carta de “disculpa” al pueblo de Guatemala y de perdón “sincero” a Dios; al finalizar la misma incluye el versículo 1a. Juan 1:9. Lamentablemente su “disculpa” de sincera no tiene nada porque cita: -por cualquier acto o acción que haya podido cometer y que de forma directa o indirecta, les haya podido ocasionar cualquier inconveniente o perjuicio -cualquier perjuicio, que sin quererlo, le haya podido ocasionar.

Por supuesto que Dios perdona, pero cuando nos acercamos con un corazón contrito y humillado, teniendo un genuino arrepentimiento, no le voy a dar el versículo, búsquelo usted, está entre Génesis y Apocalipsis.