El juicio
buscando a syd
Publicidad
buscando a syd
Limpiar la casa.– Quizá lo que corresponda sea limpiar la casa. La casa, que es un caos. Es por culpa de las arañas, que secretan largas tiras de material viscoso. Y por los horribles fantasmas, que meditan en los rincones. Además están los muros, de los cuales brotan tensos alfileres. Y luego están todos esos teléfonos celulares, rotos en la tina. Un antílope expira en el cuarto. No estás. Llévame al río cimero.– No te echo ninguna cosa en cara, ni espero de vos ya nada mejor que lo que siempre me diste, que siempre fue muy poco. Tengo apenas un deseo, desde este cuarto duro: llévame al río cimero, a toser toda esta sangre. Esta sangre, que toso y toso. Nido.– Hoy en la noche dormiré en un nido de palomas cortadas. Grito.– Me has gritado. Me has dado uno de tus gritos clásicos, uno de esos gritos que
Publicidad
Publicidad