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AFP —Al menos treinta y dos personas se encontraban desaparecidas ayer después de que colisionaran en el mar de China Oriental un carguero y un buque petrolero, que se incendió tras el accidente, según las autoridades chinas, que trataban de contener las filtraciones de hidrocarburos.
El buque, con bandera panameña y que transportaba 136 mil toneladas de hidrocarburos ligeros (condensados), “se incendió completamente”, indicó el Ministerio de Transportes chino en un comunicado.
Su tripulación, formada por 32 personas –30 iraníes y dos bangladesíes– seguía desaparecida al final de la tarde, mientras que las operaciones de búsqueda se intensificaban.
La otra embarcación implicada, un carguero chino con bandera hongkonesa, transportaba 64 mil toneladas de semillas y no sufrió daños “que pongan en peligro su seguridad”.
Su tripulación, compuesta por 21 personas, todas de nacionalidad china, “ya fue socorrida”, según las autoridades.
En paralelo a las operaciones de búsqueda, Pekín trataba de contener el impacto ambiental.
El Gobierno envió al lugar ocho navíos, de los cuales varios estaban destinados a las operaciones de limpieza, según la agencia oficial Xinhua.
El objetivo es “evitar cualquier desastre secundario” fruto de la colisión, precisó Geng Shuang, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, en un comunicado.
Por su parte, Seúl desplegó un navío de los guardacostas y un avión, a petición del Gobierno chino.
“La investigación para (determinar) la causa de la colisión continúa”, afirmó Geng.
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Veintidós países de la zona Europa, que incluye 53 países, entre ellos Rusia, han registrado casos vinculados a esta nueva cepa.
Junto con Oktar, se presentaron cargos contra otras 236 personas, algunas de las cuales fueron condenadas igualmente a penas de prisión.
Más de una docena de caravanas han partido de Honduras desde octubre de 2018, pero han chocado con el muro y los despliegues de miles de guardias fronterizos y militares.
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