María José Barrios empezó a utilizar estos microrrelatos en su tienda en el año 2013, pero hace un mes copió a mano un fragmento del breve cuento y lo pegó en la puerta de vidrio de su local y esta vez estalló su popularidad como nunca antes. En principio lo hizo en forma de broma para los trabajadores internos, pero alguien tomó la foto del cartel, lo subió a Facebook y le ha dado la vuelta al mundo. Al punto de que Barrios tuvo que atender a decenas de periodistas que acudieron a su comercio buscando a la autora de dicho texto. El relato-cartel dice: Estimados clientes, He salido un momento a pedir la mano de Rosaura, la hija del sastre. Llevo demasiado tiempo solo. Si acepta, huiremos juntos de la ciudad, nos casaremos en la primera iglesia que encontremos en el camino, y tendremos dos hijos. Al mayor lo