…La belleza de la escultura, la solemne quietud que se perturbaba únicamente por la trepa de los monos y el parloteo de los loros, la desolación de la ciudad, y el misterio sobre ella suspendido, todo producía un interés mayor, si fuera posible, que el que yo jamás sentí en medio de las ruinas del Antiguo Mundo… Estas son parte de las descripciones de viaje del abogado y escritor estadounidense John Lloyd Stephens cuando en 1839 se internaba en la ciudad prehispánica de Copán, Honduras, después de varios días de recorrido en el corazón de la selva, guiado por sus arrieros. Lo acompañaba el arquitecto y dibujante inglés Frederic Catherwood, quien se encargó de hacer los primeros trazos de los monumentos y esculturas de la civilización maya que dieron la vuelta al mundo. Entre 1839 a 1842, Stephens y Catherwood visitaron más de 40 ciudades mayas escondidas entres las montañas