“Luego de que nos empataron 4-4 yo sabía y tenía la fe que iba a llegar una última jugada en la que podríamos conseguir la victoria y cuando llegó el tiro de esquina yo sabía que esa era la jugada que estábamos esperando y, gracias a Dios, sin dudarlo pude anotar”, comentó con su característica humildad. “Gracias a Dios se me dio la oportunidad de anotar en los últimos segundos, pero este es el esfuerzo de todo el equipo”, añadió. Dedicatoria especial En cuánto a quién le dedicaba el histórico gol contra Uzbekistán, que le dio un sonoro triunfo a Guatemala, dijo: “Es para Dios y para toda mi familia que siempre me ha apoyado, mi esposa y mis hijos, así como para toda la afición que siempre nos ha apoyado”. A mejorar Aguilar, quien no solamente es el capitán sino se ha convertido en el alma del equipo, se