¿Cómo se encuentra actualmente el caso de los campesinos detenidos?
– Ellos fueron enviados a la Granja Penal de Mazatenango, lo cual es algo ilógico porque esa es una cárcel para las personas que ya fueron condenadas. Ellos deberían estar en alguna carceleta o en una comisaría, pero los mandaron porque ya pasó mucho tiempo sin que sean escuchados en primera declaración.
¿Por qué fueron detenidos?
– Por curiosos; como cualquier guatemalteco que escucha balazos y abre la ventana para ver qué pasó. Fue por curiosos o por ver algo que no querían que vieran porque lo de las avionetas acá pasa seguido. Si fue un avionetazo, ¿por qué no está el piloto o la tripulación heridos o muertos en el accidente?
¿El juzgado ya les dio alguna fecha para la primera declaración?
– Por la familia de uno de ellos me enteré que en el Juzgado de Primera Instancia les dijeron que tal vez el martes –5 de enero–, pero yo hablé con el fiscal del caso y me indicó que todavía no tenían fecha. Ya pasó mucho tiempo sin que sean escuchados, son seres humanos, tienen derechos y se están violando sus derechos humanos; yo hablé hoy (ayer) con la Cámara Penal para pedirles que pongan atención al caso porque ellos ya pasaron lejos de su familia la Navidad y ahora el Año Nuevo. El Procurador de los Derechos Humanos (PDH) los ha estado acompañando y ya pidió ver el expediente y pidió información sobre la audiencia, pero le dijeron que hay un retraso de dos semanas en las audiencias por otros casos.
¿Usted confía en la inocencia de los detenidos?
– Yo abogo por ellos porque son mis feligreses y los conozco a ellos y a sus familias. Por lo menos a tres los conozco directamente y ninguno tiene un perfil económico alto; si ellos estuvieran involucrados en narcoactividad por lo menos tendrían una buena casa. Yo me he pronunciado para que los liberen porque los conozco, pero cuanta gente no hay que la detienen por cualquier cosa y la mantienen en prisión preventiva. Imagínese que va en su moto o en su carro y choca, lo dejan ahí mucho tiempo…