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Cuando en 2009 se adjudicó la construcción del Hospital de San Pedro Necta, Huehuetenango, se tenía previsto que fuera entregado dos años después. Sin embargo, debido a irregularidades en el proceso de edificación, el centro registra menos de la mitad de los trabajos ejecutados y existe una disputa administrativa por montos que fueron pagados sin que, supuestamente, fueran realizados por la empresa constructora a cargo de la obra. Mientras las autoridades del Ministerio de Salud Pública, el Fondo de Desarrollo Social (Fodes) y la entidad Arcos Producciones, S.A. no logran llegar a un acuerdo para liquidar el proyecto, los habitantes de Huehuetenango siguen sin tener un nuevo lugar para recibir atención. La construcción del hospital fue adjudicada en noviembre de 2009 por el extinto Fondo Nacional para la Paz (Fonapaz) a la ONG Asociación Camino para el Desarrollo de Guatemala (Acadegua), que a su vez contrató a la entidad Arcos
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