Publicidad
Vecinos de Malacatán y municipios cercanos del departamento de San Marcos dañaron y quemaron un puesto de control sanitario instalado en el ingreso del lugar, debido a la falta de información sobre los casos diagnosticados de COVID-19 en las comunidades. Los pobladores rompieron el cordón sanitario y exigieron a las autoridades gubernamentales y municipales que den a conocer el beneficio de la medida de restricción y que se permita el ingreso de ayuda para las familias. Por los hechos la Policía Nacional Civil (PNC) arrestó a cuatro hombres y una mujer. Otra de las peticiones de los manifestantes fue la renuncia del jefe edil de Malacatán, Emilio Gálvez. Asimismo, solicitaron que se dejará en libertad a varias personas quienes fueron arrestadas mientras realizaban compras. “De no tener una respuesta, continuaremos con estas medidas hasta ser escuchados”, mencionó un vecino. De acuerdo a las autoridades, el cordón sanitario se colocó como
Publicidad
Publicidad