Dos jóvenes guatemaltecos originarios de Alta Verapaz e Izabal salieron del país el 10 de marzo desde Livingston, Izabal rumbo a Chile,en una pequeña embarcación, junto a una familia para trabajar en ese país.

Sin embargo, al llegar a Honduras, las autoridades les prohibieron cruzar por Roatán y debieron quedarse allí por más de 50 días, debido a la crisis sanitaria por el COVID-19.

De acuerdo a los viajeros, solicitaron apoyo para ser repatriados, no obstante, no recibieron apoyo. Hoy por la tarde una embarcación hondureña trasladaron a los dos guatemaltecos junto a la familia chilena de puerto Cortés, Honduras a Punta de Manabique, Izabal.

El doctor del área de salud de Izabal, Irvin Vallecillos indicó que las cinco personas deberán seguir los protocolos de aislamiento domiciliario por 14 días a pesar que no presentaron síntomas a su arribo al país.