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La sesión plenaria celebrada en el Congreso el 11 de octubre de 2012 se encuentra bajo investigación del Ministerio Público (MP) debido a que en dicha reunión nueve diputados señalaron que a cambio de la autorización de un proyecto dirigido a la constructora Norberto Odebrecht, S.A. se pagaron hasta Q250 mil, los cuales se habrían acordado previamente en una reunión secreta en la zona 10 de la capital. En el Diario de Sesiones del Legislativo consta que además de la supuesta compra de votos, los congresistas que razonaron su sufragio criticaron que en el decreto aprobado de urgencia nacional en único debate para autorizar la obra Rehabilitación de la Ruta Existente y Ampliación a Cuatro Carriles de la Ruta CA-2 Occidente, no se incluyeron normas de transparencia, se hizo dirigida a una empresa en específico y causaría más endeudamiento. “¡Doscientos ochenta millones más! Y que se cumpla la sentencia: doscientos
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