En sitios como La Línea, en la zona 1, el Hoyo, en La Terminal, zona 4 o sectores de la zona 8, resulta notoria la presencia de burdeles y trabajadoras sexuales, con las  implicaciones que la actividad conlleva.

Esta entidad trabaja desde hace cuatro años en estos puntos de la capital, con la finalidad de evitar la trata de personas con posibilidad de explotación infantil.

Como el problema es complejo, los integrantes de ODISOG diseñaron el programa Mis Primeros Pasos de Gigante, con el propósito de proporcionar a los hijos de las sexoservidoras un entorno diferente y nuevas aspiraciones de vida.

“No podemos quitarles a sus hijos, pero sí ayudarlos”, dice Hernández.

En las instalaciones de un antiguo centro educativo, ODISOG comenzó a recibir a los primeros niños en 2014, fueron cuatro. “Iban a la escuela y nosotros les dimos reforzamiento escolar (matemática, idioma español y ahora inglés) y ganaron el año”, menciona.

Hoy son 32 y de ellos, cuatro comenzarán en 2017 el nivel diversificado.

Campaña navideña

Mantener al grupo en la escuela resulta una ardua tarea para la organización, que carece de fondos y personal, pero cada año impulsan en la época navideña la campaña Cajitas para el Presente.

“Buscamos donaciones de cuadernos, textos y útiles escolares para todo el año. A veces las madres gastan dinero en licor o para mantener a su conviviente. Creen que sus hijos no tiene futuro”, añade Hernández.

Del 16 al 22 de diciembre, ODISOG efectúa la colecta.

Ayuda

>Los interesados en colaborar pueden comunicarse al 5449-2931 o acudir con su donativo a la 10a. calle 12-90, zona 1, antiguo Colegio Betanzos. Aproximadamente 900 niños y jóvenes viven en condiciones de riesgo en los alrededores de La Línea, zona 1.