Utilizando una pizarra y un papelógrafo –bloque de papel sobre el cual se escribe ante un auditorio-, el juez Décimo de Instancia Penal, Walter Óliver Villatoro Díaz, explicó por qué ligaría a proceso al magistrado Érick Gustavo Santiago de León, como finalmente lo hizo y, ahora, le ha concedido medidas sustitutivas. El funcionario de la Corte de Apelaciones, presidente de la Sala Regional Mixta de Apelaciones del ramo Civil de Quiché, es sindicado por el Ministerio Público (MP) y la CICIG de haber cometido cohecho pasivo en 2014 al “negociar” –como vocal de la Sala Tercera Civil en la capital- la rebaja de una multa millonaria. Lo resuelto: cancelar en la Tesorería del OJ caución económica de Q50 mil; arresto domiciliario en la cabecera departamental de Quiché –para que siga el ejercicio de sus actividades–, obligación de presentarse al Juzgado de Paz local cada ocho días a firmar el libro