El abogado Palomo tenía una larga trayectoria en procesos de alto impacto, los cuales incluyen haber sido querellante en el caso de secuestro y asesinato de Isabel Bonifasi de Botrán, haber defendido al ex Jefe de Estado, Efraín Ríos Montt en el juicio por genocidio, al expresidente Alfonso Portillo y a Carlos Vielman, por los privados de libertad muertos en el centro carcelario de Pavón, entre otros. Meléndez y Aranky, las otras dos víctimas de la estructura, fueron asesinadas también desde una motocicleta y con la misma arma que a Palomo, esto según las investigaciones del Ministerio Público y la Policía Nacional Civil (PNC). Las pesquisas establecieron que los sicarios recibieron pagos entre Q40 mil y Q60 mil por cada asesinato, asimismo se dio a conocer que la víctima era vigilada desde una semana antes. Entre los 15 mil medios de prueba con que cuentan los investigadores hay pruebas balísticas,