EE. UU. y Rusia elevan la tensión con advertencias
Moscú expulsó ayer a un diplomático estadounidense.
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Moscú expulsó ayer a un diplomático estadounidense.
La crisis entre EE. UU. y Rusia escaló un paso más con la expulsión por parte de las autoridades rusas del “número dos” de la Embajada estadounidense en Moscú y las renovadas advertencias de Washington de que la invasión rusa a Ucrania podría ocurrir “en días”.
En un movimiento de última hora para recalcar la gravedad de la crisis, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, viajó a Nueva York para intervenir ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que tenía programada de antemano una reunión sobre Ucrania.
Blinken describió cómo Estados Unidos cree que Rusia va a proceder, empezando con la creación de un “pretexto” que justifique su ataque, que podría tomar la forma de un falso atentado terrorista, un supuesto descubrimiento de fosas comunes o incluso un ataque real o ficticio con armas químicas. Advirtió que los medios rusos ya han empezado a difundir algunas de estas “falsas alarmas”.
El siguiente paso, según EE. UU., serán reuniones gubernamentales al más alto nivel para responder a esas supuesta agresión y el inicio de los bombardeos sobre Ucrania, acompañado de un bloqueo de las comunicaciones y de ciberataques contra instituciones clave.
“Después de eso, tanques y soldados rusos avanzarán sobre objetivos clave que ya han sido identificados y señalados en planes detallados. Creemos que estos objetivos incluyen la capital de Ucrania, Kiev, una ciudad de 2.8 millones de habitantes”, aseguró Blinken.
El viceministro ruso de Exteriores, Serguéi Vershinin, que antes de que hablara Blinken había pedido evitar que la reunión se convirtiera “en un circo” con “acusaciones sin fundamento”, lamentó después las declaraciones estadounidenses. “Esto es muy desafortunado, diría que incluso peligroso”, expresó Vershinin, acusando a EE. UU. de atizar la tensión en una situación ya muy compleja.
Vershinin insistió en que su país no tiene ninguna intención de invadir Ucrania, aunque dedicó la mayor parte de su intervención a denunciar los incumplimientos por parte de Kiev de los Acuerdos de Minsk.
Esos pactos adoptados a partir de 2014 entre Rusia y Ucrania para tratar de pacificar la situación en el este ucraniano, y que incluían entre otras cosas un alto el fuego, han sido violados repetidamente por las dos partes, según los observadores internacionales.
La subsecretaria general de la ONU, Rosemary DiCarlo, reclamó el jueves a las partes envueltas en la crisis de Ucrania «que muestren la máxima moderación», tras incidentes en el este de ese país que violaron el alto fuego pactado en el acuerdo de Minsk.
Ataque a guardería
Ucrania libra desde 2014 una guerra contra los separatistas prorrusos en el este del país, en las regiones de Donetsk y Lugansk. El Ejército ucraniano denunció ayer un ataque contra Stanytsia-Luganska, que privó de electricidad a la mitad de esta localidad del este del país y dejó un hueco de obús en el muro de una guardería. Los niños se hallaban en el local, pero ninguno resultó herido. El ataque “es una gran provocación”, tuiteó el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. Sin embargo, autoridades citadas por las agencias informativas rusas acusaron a Kiev de los bombardeos.
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