Publicidad
Rusia acogió el jueves con frialdad el rechazo de Estados Unidos y la OTAN a sus exigencias de seguridad en torno a la crisis en Ucrania, aunque ambas partes han dejado la puerta abierta a mantener el diálogo. Tanto Estados Unidos como la OTAN rechazaron el miércoles por escrito las peticiones claves de Moscú: el fin de la política de ampliación de la alianza transatlántica hacia la antigua zona de influencia soviética y un repliegue militar a las posiciones de 1997. Con decenas de miles de soldados desplegados en la frontera con Ucrania que alimentan temores de una posible invasión,…
Publicidad