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La pandemia ha introducido algunos cambios en las actividades cotidianas de las personas en todo el mundo. Ahora, el distanciamiento social pasó a ser la norma que todos nosotros debemos respetar mientras que los científicos luchan por desarrollar una vacuna eficaz contra el coronavirus.
El transporte público no ha sido el único en adaptarse a la nueva realidad llamando a la cautela y a mantener una distancia de seguridad.
Los propietarios de cafeterías y restaurantes fueron más allá de estas normas mostrando una mayor creatividad tras el levantamiento paulatino de las restricciones impuestas al movimiento de las personas. Algunos de ellos instalaron cúpulas y demás equipos de protección con el objetivo de proteger a sus clientes contra posibles contagios.
Hasta la fecha, más de 8,5 millones de personas se contagiaron con COVID-19 y más de 450.000 no lograron sobrevivir a la pandemia. El número total de contagios continúa creciendo con el paso de los días.
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Los diputados analizan presentar enmiendas sobre la forma de financiamiento de la compra de la vacuna y los mecanismos de transparencia en las negociaciones.
Es tiempo de acabar con la pésima costumbre de la corrupción en el sector público.
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