Ponte en forma: Correr no es recomendable con personas de mucho sobrepeso ya que significa un impacto importante para los músculos y articulaciones.

Gana Fuerza: Convine el running con una sesión de gimnasio para ganar musculatura y así poder correr más rápido y evitar lesiones.

Tómalo con mucha calma el primer día:   Porque lo más probable es que el segundo día ya no tengas ganas de volver a salir.

Equípate: Es importante invertir en un buen par de zapatos.

Empieza de apoco: Durante los primeros días corre entre 10 a 30 segundos, camina entre 1 y 2 minutos. Repite hasta que se termine el tiempo que definiste.

No te olvides de estirar: El calentamiento es imprescindible para evitar lesiones.

Descansa: Es importante dar el descanso necesario a todo el cuerpo para que puedas renovar su energía y vigor.