La 94 edición de los Premios Óscar coronó a la cinta CODA como Mejor película y premió a Jessica Chastain, protagonista de Los ojos de Tammy Faye, como Mejor actriz. Sin embargo, quien atrajo todos los focos fue Will Smith, y no por haber obtenido el galardón como Mejor actor por Rey Richard, sino porque minutos antes sostuvo un altercado con Chris Rock por haber bromeado acerca de la alopecia de su esposa, Jada Pinkett Smith. Entre lágrimas, el artista admitió estar abrumado al tiempo que justificó sus actos al afirmar que el papel que protagonizó le enseñó a defender a su familia. Señaló que muchas veces se acepta el abuso. “Dejamos que la gente hable locuras sin tener respeto y tenemos que sonreír”, dijo. Concluyó: “Espero que la academia me vuelva a invitar”. Durante la ceremonia también se hizo un homenaje a la cinta El Padrino por su 50