Un gol de disparo lejano de Marcus Rashford (56) acabó con las esperanzas del Betis de levantar el contundente 4-1 sufrido en la ida en Old Trafford, tras un partido en el equipo andaluz puso intención, pero le faltó precisión.
“Teníamos el convencimiento que podíamos presionarlos si hacíamos un gol temprano. Me voy muy contento por lo que hizo el equipo”, dijo tras el encuentro el técnico del Betis, Manuel Pellegrini.
Los verdiblancos, que acusaron la falta del lesionado Nabil Fekir, empezaron apretando a un United que intentó controlar el encuentro, pero sufrió la presión rival en los primeros minutos de la primera parte.
Juanmi pudo abrir el marcador pronto, pero su disparo demasiado cruzado se fue lamiendo el palo (8) y poco después el capitán Joaquín casi sorprende al meta David de Gea con un tiro lejano repelido por el palo (11).
El Betis llegaba más, pero se encontró con la buena actuación de De Gea, que ganó un mano a mano a Juanmi cuando el atacante bético llegaba prácticamente solo (32).
“Tuvimos tres opciones muy claras que habrían cambiado el partido, el marcador y la presión con la que el Manchester United jugaba”, lamentó Pellegrini.
El United, verdugo del Barcelona en la ronda anterior, fue poco a poco sacudiéndose la presión de los locales hasta rozar el tanto en descuento de la primera parte con un disparo del uruguayo Facundo Pellistri en el área que dio en el palo (45+2).
El descanso sirvió, como ocurriera en la ida, para activar al United que tras la pausa se hizo con el control del encuentro y acabó metiendo al Betis en su campo.
“En la segunda parte estuvimos mucho mejor con el balón, lo mantuvimos en su campo y entonces creas ocasiones”, dijo tras el partido el entrenador del United, Erik Ten Hag, a BT Sport.
Rashford, que había mandado un balón a las nubes sólo ante Rui Silva (54), se resarció con un tiro lejano ante el que nada pudo hacer el meta verbiblanco (56).
El gol cayó como un jarro de agua fría para el Betis, que acusó el golpe y aunque siguió peleando por ganar el partido se vio superado por un United convertido en amo del encuentro.
Juventus se clasifica
Con goles del serbio Dusan Vlahovic de penal (45) y de Federico Chiesa (90+5), la Juventus se impuso por 2-0 al Friburgo (3-0 en el agregado) y se clasificó este jueves para los octavos de final de la Europa League.
La Juventus viajaba a Alemania con la ventaja mínima obtenida en la ida y el Friburgo buscó igualar la eliminatoria nada más darse el pitido inicial.
El japonés Ritsu Doan, con un globo lejano, estuvo muy cerca de sorprender a Wojciech Szczesny (5) y el portero polaco evitó que la Juventus encajara el primer gol minutos después con una espectacular atajada a un cabezazo de Matthias Ginter (22).
Pero la Juventus sentenció la eliminatoria justo antes del descanso, cuando Vlahovic (al que ya habían anulado un gol en el 28 por fuera de juego) transformó un penal por mano de Manuel Gulde que además le supuso la segunda amarilla y la consiguiente expulsión para el defensa alemán (45).
El Friburgo no dio la eliminatoria por perdida y comenzó la segunda parte buscando el gol, aunque no lo lograron y a medida que avanzaban los minutos, la Juventus fue controlando cada vez más el ritmo del partido y creando algunas ocasiones para aumentar diferencias, como un doble remate que atajó Mark Flekken a la hora de juego.
Esa doble acción italiana acabó con la resistencia alemana, que ya sí dio la eliminatoria por perdida frente a una Juventus que controló bien para evitar sustos en el tramo final del encuentro.
Ya en el descuento, Federico Chiesa anotó el definitivo 2-0 (90+5).
Sevilla sufre pero avanza
Pese a perder por 1-0 en Estambul frente al Fenerbahce, el Sevilla se clasificó este jueves para los cuartos de final de la Europa League gracias al 2-0 obtenido en la ida.
El ecuatoriano Enner Valencia anotó desde el punto de penal el gol del triunfo turco (45) ante un Sevilla, cinco veces ganador de esta competición, que sufrió mucho para aguantar el resultado por la intensa presión del Fenerbahce, sobre todo en la segunda parte.
“Hoy fue una de las mejores expresiones el equipo en el crecimiento defensivo”, destacó tras el partido el entrenador sevillista Jorge Sampaoli.
“Jugar en este estadio ante este rival es muy difícil y el equipo neutralizó el primer tiempo. En el segundo ellos tuvieron ocasiones, nosotros también tuvimos y fue más de ida y vuelta”, añadió el técnico argentino.
Con la confianza del 2-0 obtenido en el Sánchez Pizjuán, el Sevilla comenzó controlando el partido ante un Fenerbahce que buscaba el gol para meterse en la eliminatoria, pero que vio cómo uno de sus delanteros, el belga Michy Batshuayi tenía que retirarse de la cancha al cuarto de hora con un problema muscular.
El Sevilla tuvo controlado el partido durante la primera media hora, pero a partir de ese momento el encuentro se alocó, algo que beneficiaba a los turcos, que de acercaron una primera vez con peligro con un disparo de Ismail Yüksek que detuvo Marko Dmitrovic (32).
Al equipo hispalense se le comenzó a complicar todo cuando el árbitro inglés Michael Oliver pitó como penal una mano del brasileño Alex Telles que Valencia convirtió en el primer gol del partido (41).
Ese tanto dio alas a los locales, que pudieron haber llegado al descanso con la eliminatoria igualada, pero Telles salvó milagrosamente un remate turco (43).
El equipo de Jorge Sampaoli comenzó muy nervioso el segundo tiempo y el Fenerbahce tuvo varias ocasiones para haber marcado el segundo (48, 49, 52 y 53), animado por su público, cada vez más exaltado hasta el punto que el partido tuvo que interrumpirse porque Dmitrovic fue alcanzado por un objeto lanzado desde la grada (55).
El Fenerbahce tenía sometido completamente al Sevilla y Valencia tuvo una gran ocasión para igualar la eliminatoria, pero Dmitrovic salvó al equipo andaluz con una espectacular atajada (68).
El noruego Joshua King, sustituto de Batshuayi, lo intentó poco después pero su disparo se marchó fuera (75).
Después de reclamar un penal por un derribo a Suso (85), el Sevilla rozó de nuevo la tragedia: Hakan estuvo muy cerca de forzar la prórroga (88) y ya en el descuento la tuvo de nuevo King (90+1).
Al equipo español le tocó sufrir hasta el final después de que Erick Lamela no lograse convertir un golpe franco desde la frontal del área que hubiese matado definitivamente la eliminatoria (90+6).