Djokovic también gana en su debut

Sandgren (66º) no fue rival para Djokovic, que se impuso en tres sets, por 6-2, 6-4 y 6-2.

“Me honra de haber jugado el primer partido masculino en sesión nocturna en la historia de Roland Garros. Ha sido extraño jugar ante unas gradas vacías y con esta iluminación realmente intensa. Espero encontrarme con el público en mi próximo partido”, declaró el serbio.

Djokovic ultimó su puesta a punto en el torneo de Belgrado la semana pasada con el fin de intentar acabar con el reinado en París de su gran rival Rafael Nadal.

“Estoy muy contento de la manera en la que jugué esta noche”, admitió.

Su rival en segunda ronda será el uruguayo Cuevas, que antes había vencido al francés Lucas Pouille por 6-3, 6-1 y 6-3.

Pese a no llevar una temporada destacada en la arcilla europea, siendo incapaz incluso de clasificarse para el cuadro final en los torneos de Madrid y Roma, el veterano tenista uruguayo de 35 años dio buena cuenta de Pouille (86ª) que pese a sus 27 años sigue demostrando que está muy lejos del jugador Top 10 que fue hace poco más de dos años.

Pese a tratarse de dos veteranos del circuito, Djokovic acaba de cumplir 34 años, el serbio nunca se ha enfrentado a Cuevas.

Rublev cae

El ruso Andrey Rublev, séptimo jugador mundial y finalista en Montecarlo tras haber eliminado a Rafael Nadal, fue eliminado en la primera ronda de Roland Garros por el alemán Jan-Lennard Struff (42º); 6-3, 7-6 (8/6), 4-6, 3-6 y 6-4.

En 2020, Rublev alcanzó los octavos del Abierto de Australia y los cuartos en el US Open y Roland Garros.

En el inicio de la presente temporada alcanzó nuevamente los cuartos en Melbourne.

Hasta ahora era uno de los hombres en forma del circuito, con títulos en Róterdam, la ATP Cup con Rusia, semifinales en Dubái, Doha y en el Masters 1000 de Miami.

Justo antes de París, había alcanzado la final en el Principado y los cuartos en Barcelona y Roma.

En la segunda ronda Struff jugará con el argentino Facundo Bagnis (104º).

 Ashley Barty sufre pero pasa

La australiana Ashley Barty, número uno de la WTA, necesitó tres sets para vencer a la estadounidense Bernarda Pera (6-4, 3-6 y 6-2) pero ya está clasificada para la segunda ronda de Roland Garros.

En su regreso a la arcilla parisina después de conquistar el título en 2019 (el año pasado no participó en Roland Garros por la pandemia), la joven australiana (25 años) se medirá en segunda ronda a la polaca Magda Linette o a la francesa Chloe Paquet.

“Es muy especial estar aquí. Quedé muy decepcionada por no haber podido venir el año pasado”, declaró la tenista antes de abandonar la pista central de Roland Garros.

El estado de forma de Barty era una de las dudas al comenzar el torneo, ya que hace dos semanas tuvo que abandonar en Roma por lesión y este martes lució un vendaje en su pierna izquierda.

La alerta saltó justo después de perder el segundo set, cuando requirió la presencia de un fisioterapeuta para que le masajeara el muslo izquierdo en la misma pista.

Aunque después dio muestras de estar recuperada para llevarse el tercer set y el partido frente a una peleona Pera.