Schwartzman conservaba escasas posibilidades tras su partido, pero para mantenerlas hasta la tercera jornada del viernes necesitaba que Novak Djokovic ganara a Daniil Medvedev unas horas más tarde.
El ruso, sin embargo, fue muy superior (6-3, 6-3) al serbio y se clasificó a semifinales, complicando de paso el panorama al número uno mundial.
Schwartzman ya había caído el lunes en su primer partido, ante Djokovic, en dos sets (6-3, 6-2).
Argentina no podrá sumar en esta edición un nuevo título en un torneo en el que dos jugadores de su país triunfaron en el pasado en el cuadro individual, Guillermo Vilas en 1974 y David Nalbandian en 2005. Juan Martín Del Potro llegó además a una final, en 2009, pero cayó en ella contra el ruso Nikolay Davydenko.
Medvedev tiene seguro acabar líder del grupo ‘Tokio 1970’, mientras que el segundo puesto y con él el otro billete en liza será para Djokovic o Zverev, que se medirán el viernes.
Zverev, campeón del Masters en 2018 precisamente ante el serbio, dio un impulso a sus opciones con su triunfo sobre Schwartzman, después de su derrota de la primera jornada ante Medvedev en dos mangas.
«El partido del viernes será el más duro que se pueda tener aquí», avisó sobre su pulso contra Djokovic, al que superó precisamente en la final del Masters hace dos años.
Para Zverev, ahora empieza «un torneo clásico, en el que hay que ganar todos los partidos para no quedar eliminado».