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Cuando por fin tenemos en nuestros brazos a nuestro bebé arcoíris NO olvidamos que la tormenta haya sido difícil o que nunca sucedió. No estamos negando nuestro dolor, un bebé arcoíris nos brinda la posibilidad de poder apreciar la luz de una nueva esperanza convertida en un hermoso bebé.
Cada mujer tiene su propio y muy personal proceso de maternidad. Hay algunos que por tristeza están acompañados de dolorosas pérdidas. Perder a un bebé antes de tiempo es algo sumamente doloroso, es un sentimiento desgarrador que nos puede borrar la esperanza. Sin embargo, muchas veces, la vida nos regala una luz en esa oscuridad.
Los bebés arcoíris son esos niños que nacen sanos luego de que una madre ha tenido una pérdida gestacional anterior. A estos niños se les llama “niños arcoíris” porque con su llegada traen luz a la oscuridad de la tormenta. Con su llegada borran los miedos y temores que la mamá sufrió por meses.
Cuando por fin tenemos en nuestro brazos a nuestro bebé arcoíris no olvidamos que la tormenta haya sido difícil o que nunca sucedió, no estamos negando nuestro dolor, un bebé arcoíris nos brinda la posibilidad de poder apreciar la luz de una nueva esperanza convertida en un hermoso bebé.
Mamá de un bebé arcoíris:
Sé que las perdidas y el dolor te dejaron con algunas inseguridades que nunca te abandonan. Prometo que cada día que pase podrás respirar un poco más profundo. Cada día te llenará más el amor a tu hijo. Hasta que un día te des cuenta que el amor ha superado al dolor.
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