La Operación Ronda de Noche, que moviliza desde 2019 a un equipo internacional dentro de una vidriera que protege y visibiliza el cuadro más mítico de Rembrandt, ha dado este miércoles su primer fruto: la detección de un boceto oculto detrás de las capas de pintura, la génesis de la obra. Durante los últimos dos años y medio, el cuadro ha sido mapeado meticulosamente usando fotografía de alta resolución, escaneo de fluorescencia de rayos X, espectroscopia de imágenes de reflexión y análisis informático altamente avanzado. El maestro barroco esbozó y buscó “la composición ideal durante mucho tiempo” antes de plasmar…