El discurso de Siri Hustvedt
La escritora estadounidense recibió el viernes pasado el Premio Princesa de Asturias de las Letras. Publicamos el discurso que pronunció durante la ceremonia
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La escritora estadounidense recibió el viernes pasado el Premio Princesa de Asturias de las Letras. Publicamos el discurso que pronunció durante la ceremonia
Majestades Altezas Reales Queridos premiados señoras y señores De pequeña solía maravillarme ante cosas corrientes. Un tenedor encima de la mesa o una flor en un jarrón de repente adquirían la extraña cualidad de un misterio metafísico. Ver a mi hermana lamer un cucurucho de helado me llevaba a pensar en lo raras que eran las lenguas humanas, con sus bultos y el surco en el centro. ¿Y las sensaciones que iban y venían a lo largo del día: los escalofríos y los sudores, los sabores dulces y los agrios, los retortijones cuando los niños del colegio se reían de mí o el deleite de los besos y los abrazos de mi madre? Y luego estaban las reglas de la vida, que no eran pocas. ¿Por qué los niños podían dar brincos cuando ganaban un concurso de caligrafía y a las niñas no se nos dejaba ni sonreír, y menos
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