Iximché: visiones de un lugar sagrado
La antigua capital kaqchikel se mantiene como un centro ceremonial, un destino turístico y un vestigio del pasado.
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La antigua capital kaqchikel se mantiene como un centro ceremonial, un destino turístico y un vestigio del pasado.
Iximché es un lugar de memoria. Por medio de sus ruinas cuenta la historia del pueblo Kaqchikel y fue escenario clave en el proceso de conquista de la actual Guatemala. No obstante, en la actualidad es fácil olvidar estos detalles, dejarse llevar por el rumor del viento y perderse en su vegetación infinita. Parece un parque y cumple con esa función. Pero más allá del uso actual, este territorio fue ciudad, fue fortaleza, estuvo vivo y fue un lugar sagrado para sus habitantes. Las estructuras, rodeadas de barrancos, resplandecieron alguna vez con estuco y albergaron a gobernantes y sacerdotes. Fue también el primer asentamiento formal de los españoles, quienes llegaron a ella en 1524. Quemada de forma parcial en 1526, fue abandonada poco tiempo después. Las ruinas de Iximché son hoy uno de los principales atractivos turísticos del altiplano nacional. Se ubican en Tecpán, Chimaltenango, a 90 kilómetros de la
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